En un acompañamiento más niños y padres de familia y/o cuidadores comparten experiencias según el grupo etario del niño o la niña, aprenden jugando a reconocer texturas y desarrollar su motricidad fina y gruesa, mostrando su capacidad de autonomía en el desarrollo de las actividades propuestas, como pasar por un Tapete sensorial, insertar un cordón en el zapato, o jugar con su prenda favorita. Cada niño contó con la compañía de su familia Y adecuaron un lugar en su casa.